EL SIGNIFICADO DEL SIGNO SOLAR PARA LA ASTROLOGIA ESOTERICA
Introducción
En
este articulo nuestra intención es reflexionar, desde una
perspectiva mas bien psicologica, el significado que el signo solar
tiene para la astrología esotérica.
Para
ello dividiremos la reflexión en cinco partes.
1.
El Sol como fuente de Luz en su propio sistema.
2.
El rol del signo solar en un horóscopo o conciencia humana.
3.
El rol que el signo Solar debe tener frente al signo Ascendente.*
4.
Varios ejemplos para un estudio comparativo entre signos.
5.
Conclusión (“los dos en uno”)
El
Sol en “si mismo” es Luz, una entidad que desde “si misma”
emite la energía que genera y regenera su propio sistema
(solar) o “cuerpo”.
Un
“cuerpo” o sistema solar de geométrico funcionar, actitud que
genera un campo de influencia de gran belleza, un lugar que, al calor
de su propia y constante energía lumínica, ofrece las condiciones
idóneas para que en el se establezcan y evolucionen múltiples
reinos o formas de vida.
Este
sería el aspecto mas físico o vistoso del poder solar, pero no hay
que olvidar que tras el aspecto material (personalidad) de toda
entidad, en este caso solar, se amaga siempre una parte subjetiva
(alma)
con propósito (espíritu).
Una
parte, velada para la vista física, que utiliza la Vitalidad
o inteligencia de su propia materia, mas o menos perfeccionada o
evolucionada, para acrecentar (y transmitir) en ella y desde ella
misma y a todas las formas de vida que en ella residen el calor de
su Amor
y
el poder de su Espíritu.
Podemos entonces decir que el
sol es una entidad (de gran calibre) que desde su propia
auto-conciencia (luz) atesora grandes dosis de Vitalidad, Amor y
Espíritu; y que toda forma de vida que este bajo las leyes de este
sistema solar, deberá también, de una forma u otra y en mayor o
menor medida, experimentar y expresar las tres cualidades básicas
que su logos principal en si mismo atesora.
Como es lógico pensar toda
entidad debe evolucionar a través del todo mayor, y en este sentido
el Sol, al igual que la tierra o el ser humano que en ella habita, en
su periplo vital también hace su recorrido a través de los 12
signos del zodiaco. 12 energías que le ofrecen, a través de sus
cualidades, la oportunidad para poder percibir y adquirir mayor
experiencia y con ello mayor auto-conciencia o perfeccionamiento de
sus 3 cualidades básicas antes mencionadas.
Como
sabemos actualmente el Sol transita por el
Signo de Acuario,
y por tanto, y sin animo de profundizar, las características de
este signo son, y serán durante 2000 años mas, la
gran oportunidad
para que el Sol pueda evolucionar. Oportunidad que necesariamente se
verá reflejada en todos los reinos y formas de vida que están bajo
las leyes de dicho Sol.
Por
tanto, y partiendo del profundo significado de la frase “como
es arriba es abajo”,
el lugar (signo) que ocupe el sol en el horóscopo de un ser humano
el día de su nacimiento siempre será el signo de la oportunidad, a
través del cual este ser humano podrá percibir y experimentar sus
3 energías básicas innatas: vitalidad, amor y poder espiritual.
Gracias
al poder de iluminar (Conciencia) que ofrece la presencia del sol en
una carta natal, el signo donde este se sitúe (y en menor medida su
signo opuesto), marcarán las tendencias principales del dueño de
la carta, las características mas vistosas o personales, su
determinación y temperamento, su vida presente y problema actual,
sus dones heredados, peculiaridades ..., en definitiva el
signo solar marcará la naturaleza de las fuerzas y la cualidad de
las energías con las que la conciencia o alma que reencarna en
determinada vida deberá convivir y manipular
Fundamentalmente
el
signo solar muestra la linea de menor resistencia,
lo ya adquirido (en otras vidas) y por tanto lo mas fácil de
expresar o actuar en la presente.
En
este sentido todos sabemos que aquello
que nos es dado con facilidad puede ser utilizado en forma excesiva o
egoísta.
Es decir, las características del signo solar son susceptibles de
ser propensas a generar actitudes demasiado activas o agresivas,
actitudes compensatorias, repetitivas por pasión o por sentido de
poder, “ciegas” o excesivamente cómodas, poco altruistas,
“facilonas”, orgullosas, desconsideradas o irrespetuosas con el
entorno, poco generosas ..., todo ello dependerá muy mucho del tipo
de conciencia que gestione dichas características y de la mayor o
menor necesidad de esta conciencia para atender a las demandas mas
espirituales escritas en su signo ascendente.
Es
interesante observar que para la
astrología védica o jyotish (cultura
no tan individualista como la occidental), el sol por si mismo no es
considerado como un planeta “benigno”, sino mas bien como una
fuente de problemas por su egolatria, por su capacidad de “quemar”
o no tener en consideración a sus compañeros (planetas) mas
cercanos. El astrólogo oriental no olvida que el sol por si mismo es
un calor excesivo capaz de matar la planta.
En
cierta medida nosotros (desde la astrología esotérica o del alma)
reafirmamos dicha posición, afirmando que (como dice la astrologia
exotérica) el poder solar es el que marca las características
principales de un individuo; pero que estas evidentes cualidades,
tan valoradas en nuestra cultura occidental por su capacidad activa y
escenificadas en un horóscopo a través de las fuerzas del signo
solar, no son suficientes para evolucionar correctamente, sino que
sencillamente solo, y fíjense que decimos solo, son la base para,
con la
valiosa inspiración del signo ascendente,
experimentar y expresar nuevas metas o mayores estados de
conciencia.
Dicho de otra forma, para la
astrología del alma, el poder del signo solar deja de “quemar”
cuando es mirado (reflexionado-utilizado) a través del lente que
implica el significado del signo ascendente.
Así como el poder del signo
solar nos marca las fuerzas y energías mas personales que la
conciencia o alma esta intentando utilizar o manipular en determinada
vida, el poder del signo ascendente nos marca la fuerza de esta alma
en si misma, que esta tratando de expresarse a través de estas
características mas solares o personales.
Quizás entendamos mejor este
ultimo párrafo si comparamos y analizamos estas dos definiciones que
nos ofrece Alice Bailey - DK en su magnifico libro Astrología
Esotérica.
El
signo del Sol. -
Indica el actual problema del hombre; fija el paso o ritmo
establecido de su vida personal; se relaciona con la cualidad,
temperamento y tendencias de la vida, que tratan de expresarse
durante esta particular encarnación y sugiere el aspecto rajásico
o actividad del hombre nonato. Fundamentalmente las fuerzas de este
signo indican la línea de menor resistencia.
El
ascendente o signo naciente.
- Indica la vida futura y el inmediato propósito del alma para esta
encarnación. Mantiene el secreto del futuro y presenta la fuerza
que, correctamente empleada, conducirá al hombre al éxito.
Representa el aspecto sátvico o armónico de la vida, y puede
producir correctas relaciones entre el alma y la personalidad en una
encarnación dada, señalando así el camino para reconocer la
fuerza del alma.
Es claro, a raíz de las dos
definiciones, que espiritualmente hablando el signo ascendente
frente al signo solar coge un rol mas prominente. Un rol, que frente
a los poderes mas objetivos del signo solar, se evidencia como un
“futuro” mas difícil de alcanzar, y por ello mismo mas subjetivo
(menos evidente), prometedor y capaz de aportar armonía. Un rol
capaz de relacionar el Alma con la Personalidad, señalando así,
(como nos dice el texto), el camino para reconocer la fuerza del
Alma.
Antes de finalizar este
articulo vamos a estudiar de forma comparativa para comprender mejor
lo dicho anteriormente cuatro ejemplos de combinaciones de signos
ascendentes versus signos solares.
El estudio pretende ser
sencillo, y sin un análisis excesivo, ya que el reconocimiento del
rol que determinado signo ascendente pueda tener en relación con un
signo solar depende muy mucho del tipo de conciencia e intuición que
debe gestionar dicha combinación
El
nivel de conciencia
Hay que pensar que para que una
conciencia o alma tenga la necesidad de atender a las fuerzas
marcadas por su signo ascendente debe ser ante todo una conciencia
con cierto grado de evolución. Evidentemente una conciencia con sus
propias tendencias personales, pero también con fuertes
tendencias espirituales, tendencias estas ultimas que, a través del
tiempo y la experiencia, se deben imponer o si mas no armonizar con
las primeras.
Las
tendencias o características de una conciencia espiritual
Psicologicamente hablando estas
tendencias espirituales se reconocen en la capacidad de la conciencia
para practicar la aceptación (tolerar la frustración), para
practicar el altruismo (servicio), para practicar la meditación
(reflexión no condicionada), y para practicar la constante y
siempre tan necesaria inofensividad (mental emotiva y de palabra)
hacia uno mismo, el hermano o su entorno.
Los
4 ejemplos
Este pequeño estudio analiza
los ejemplos desde 3 vertientes, la de los signos, la de sus
respectivos regentes exoterico y esotéricos y la de los rayos
implicados, pero si os fijáis los tres tipos de análisis se
asemejan mucho entre si, dando a entender una posibilidad de síntesis
(intuición) mayor.
Los
ejemplos
se
exponen desde las dos posibilidades comparativas:
Ascendente
Escorpión - Sol Leo
Aquí las fuerzas solares o
personales son realmente muy carismáticas, orgullosas e
individualistas, ya que este ascendente coloca al Sol en Leo en casa
X, pero la magnética fuerza escorpiniana del Alma demanda un plus de
mayor realidad y compromiso. La implicación con la vida debe ser mas
empática, intensa, luchadora, y emotiva. No solo vale estar motivado
para “brillar” (Ser), sino también para morir, morir desde los
aspectos mas personalistas, morir para así renacer mucho mas cercano
e implicado con la necesidad del alma que por sintonía también es
la necesidad del hermano o entorno.
Regentes
La capacidad de implicarse
hasta lo mas fondo de Marte debe dominar sobre el exceso de brillante
individualidad que este sol en Leo casa X tanto posee.
Rayos
implicados
En Escorpión el poder
intuitivo y generador de belleza del IV rayo de Armonía en el
Conflicto motivado por el ideal sensible que atesora el VI rayo de
Devoción, en este ejemplo, se debe imponer sobre el poder mas bien
excesivo (destructivo) del 1Rayo de Voluntad y Poder que en este caso
atrae Leo.
Ascendente
Leo - Sol Escorpión
En este ejemplo la fuerzas
solares del Escorpión pueden demostrar gran capacidad de generar
apego, dependencia o desengaños a través del deseo i/o la falsa
ilusión. Este ascendente sitúa la característica intensidad del
sol en Escorpión en casa 4, la casa de las emociones mas básicas o
de la infancia, situación que puede ser “emotivamente cegadora”
en sumo grado, pero la conciencia de un Alma influenciada por la
fuerza del León, tiene como característica principal el poder de
adquirir auto-conciencia por muy difícil o ofuscada que sea la
situación. En este caso el León desde su propia luz desenreda y por
tanto se libera de los “enganches” psíquicos tan característicos
del Escorpión. El fuego mental consciente, demanda aquí mayor
capacidad de ser uno mismo, dando así una nueva claridad y utilidad a las
poderosas sensibilidades y emociones (Escorpión signo de agua en
casa 4) que le relacionan con su entono.
Regentes
En
este caso la cualidad de adquirir auto-consciencia leonina, a través
del sol como regente esotérico del ascendente velando*
a Neptuno, debe iluminar (dirigir) el exceso (todo exceso es egoísmo)
pasional o emotivo de Marte el regente exotérico de Escorpión.
Rayos
El poder o voluntad del 1Rayo
junto con la sabiduría amorosa del 2Rayo que aporta el signo de Leo
desde la conciencia del Alma, aquí deben dirigir o dar un nuevo
sentido a las fuerzas mas personales de Escorpión que atraen a un
4Rayo excesivamente pasional, caprichoso y dependiente de las fuertes
emociones del 6Rayo también presente.
Ascendente
Géminis - Sol Libra
En esta combinación la linea
de menor resistencia es libriana, el Sol en este signo no brilla
especialmente, pero es muy inteligente, educado, con sentido del
humor y el equilibro, armónico y sensible a la belleza, pero
también, y desde su aspecto mas personalista, puede ser frío,
distante, hipócrita, centrado solo en las formas externas,
excesivamente mental, poco decidido o empático, y por estar en este
caso en casa V, también excesivamente individualista. Géminis,
desde el Ascendente o fuerza del Alma, promete aire nuevo, una mucha
mayor fluidez en las interrelaciones (internas y externas). La
conciencia aquí debe reconocer las dinámicas vitales que puedan
arrastrar a Libra a descubrir actitudes mucho mas cercanas,
espontaneas, y sencillas. Géminis en este caso puede ofrecer un
nuevo equilibrio mas dinámico y amoroso. Una actitud que demuestra
que es gracias al Amor (flexibilidad) y no al poder de la mente que
la conciencia puede ínter-actuar en si misma dualidad, mostrando con
ello servicio activo, creatividad, comprensión o mente amorosa.
Regentes
y Rayos
En este ejemplo, Venus, (V rayo
de Luz o Ciencia Concreta), como regente esotérico de Géminis, es
un Venus tocado por el Amor Sabiduría del II rayo que atrae el
mismo signo. Una conciencia personal libriana puede ser excesivamente
distante o interesada, ya que a la capacidad de análisis (en este
caso separatista) del V rayo que aporta su Venus como regente
exoterico, hay que añadir la frialdad de un orden excesivamente
dependiente de las forma externa o lo estético que aporta el VII
Rayo a través de un Libra egoísta. Hay un exceso de rayos impares
(mentales), de ahí la benignidad (corazón) o oportunidad del II
rayo que ofrece Géminis. El control que ejerce la mente es roto por
el poder del Amor.
Ascendente
Libra – Sol Géminis
Un Sol en Géminis desde una
actitud personal egoísta ofrece un exceso de interacciones
internas y externas, interacciones duales superficiales, gratuitas,
mal integradas o sencillamente no integradas y por tanto generadoras
de desequilibrio, de sin sentido, banalidad o infantilismo. En este
caso el sol en casa 9 desde el aspecto egoísta da demasiados y
pomposos viajes. Así pues la conciencia debe reconocer la fuerza
del Alma en el equilibrio divino que ofrece Libra. La calma mental
como paso previo para intuir como utilizar la simpática vitalidad
amorosa geminiana de forma mas dirigida, responsable y eficiente. La
eficiencia, especialmente en este caso, se expresará con gran
belleza.
Regentes
Si la conciencia sabe reconocer
el poder mental organizador de Urano, regente esoterico de Libra,
podrá, en ella misma primero y después en su entorno, organizar un
nuevo espacio. Un nuevo ritmo vital donde Mercurio como regente
exotérico de Géminis podrá seguir siendo “simpaticamente”
interactivo, pero esta vez expresando el propósito el Alma.
Rayos
En este ultimo ejemplo el II
Rayo de Amor y Conocimiento junto el IV de Belleza a través del
Conflicto, atraídos por Geminis y Mercurio respectivamente,
necesitan muy mucho, debido a un exceso de vitalidad caprichosa, el
doble poder organizador que el VII rayo de Magia y Ceremonial aportan
desde Libra y Urano su regente esotérico. Si la conciencia de este
ejemplo logra integrar, en su día a día, el orden y la disciplina
característicos del VII Rayo, la expresión de sus cualidades
amorosas (II Rayo) y creativas (IV Rayo) mas personales tendrán, en el mundo físico o
social, gran éxito. Aquí especialmente la utilidad espiritual
(eficiencia) es sinónimo de expresión mágica o belleza.
Es
nuestro deseo dar a entender que las fuerzas del signo solar en si
mismas NO son “malas”, sino que son la energías, objetivamente
hablando, mas presentes y cercanas, y por tanto son las energías que
mas fácilmente puede utilizar la conciencia para su propio
beneficio o
amor propio.
Cuando
dicha conciencia por necesidad evolutiva, y a través del significado
de su signo ascendente, vaya paulatinamente integrando la fuerza de
su Alma, entonces podrá empezar a utilizar sus fuerzas solares para
el beneficio
común o
amor comprensivo.
El reajuste en la conciencia de
nuestras actitudes y dones mas personales, astrológicamente
reflejados en el signo solar, siempre nos viene dado por la
aceptación y responsabilidad (dharma) que genera el reconocimiento
de un “todo mayor”. La comprensión de un significado mayor que
astrológicamente hablando está reflejado en el signo
ascendente.
*
Para
una mayor compresión del significado que el signo Ascendente tiene
para la astrología esotérica acudir al articulo anterior a este.
*
Desde
la astrología esotérica y dependiendo del nivel evolutivo de la
conciencia dueña del horóscopo, el Sol de una cata natal puede
estar velando las energías y significados de
Neptuno
o de Urano, que sea un planeta u otro el velado por el sol dependerá
de la necesidad evolutiva de dicha conciencia. Esto es un tema en el
que profundizaremos en un posterior articulo, solo decir que en un
horoscopo Neptuno a través del sol sintetiza el aspecto amor
y
Urano el aspecto espíritu,
y que el sol en su aspecto mas fisico (a través de las tendencias
marcadas por Saturno) sintetiza la vitalidad.
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David C.M. (logos.astrologiaesoterica@gmail.com)